Argentina quizás no sea el primer país que viene a la mente al pensar en destinos de vida silvestre, pero su gran diversidad de paisajes, climas y ecosistemas, que van desde selvas subtropicales en el norte hasta bosques subantárticos en el sur, la convierten en un lugar ideal para observar especies únicas de fauna.
A continuación, te presentamos algunos de los mejores lugares para descubrir las especies más fascinantes de Argentina.
Iguazú
Hogar de una de las cataratas más famosas del mundo, el Parque Nacional Iguazú se encuentra en la provincia de Misiones, en el noreste del país, y es un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además de explorar las cataratas, puedes recorrer los numerosos senderos que te permitirán acercarte a la fauna local y las aves. El parque alberga más de 2,000 especies de plantas, 400 especies de aves y una variedad de animales, como tapires, osos hormigueros gigantes, monos aulladores, jaguares y caimanes.
Esteros del Iberá, Corrientes
Uno de los reservorios de agua dulce más importantes de Sudamérica y el segundo humedal más grande del mundo es un destino imperdible para los amantes de la vida silvestre. Los Esteros del Iberá, situados en la provincia de Corrientes, albergan alrededor del 30% de la biodiversidad de Argentina, con unas 4,000 especies de flora y fauna. Uno de los principales objetivos de los Esteros es reintroducir especies valiosas como el yaguareté, el ciervo de los pantanos, el oso hormiguero, el tapir, el pecarí de collar, el guacamayo rojo y verde, la nutria gigante, el aguará guazú y la seriema de patas rojas. Además, existe un proyecto de reintroducción del jaguar en este hábitat natural tras más de 70 años de ausencia.
Parque Nacional Los Cardones
En los majestuosos valles Calchaquíes, al noroeste de Argentina, a unos 100 km de la ciudad de Salta, se encuentra el Parque Nacional Los Cardones. Este parque es una sucesión de quebradas, sierras y valles a una altura que oscila entre los 2,500 y 3,500 metros. Su nombre proviene de los cactus cardón, que salpican el paisaje. Además de proteger un rico patrimonio prehistórico, como huellas de dinosaurios y fósiles, el parque alberga una gran variedad de fauna, incluyendo zorros colorados, guanacos, vizcachas, tinamú de monte, cóndores andinos, tuco-tuco serrano y zorros grises.
La Pampa
Argentina es famosa por sus Pampas, extensas llanuras herbáceas que han moldeado la cultura gaucha. La provincia de La Pampa ofrece a los viajeros la oportunidad de experimentar la inmensidad de estas llanuras y sierras que se extienden hasta donde alcanza la vista, sumergirse en las tradiciones de los gauchos argentinos, visitar estancias clásicas y disfrutar de un auténtico asado. Además, la Reserva Parque Luro es el lugar ideal para avistar ciervos colorados, ñandúes y el árbol endémico caldén.
Costa Atlántica de la Patagonia
La Península Valdés es el principal atractivo de la costa atlántica de la Patagonia para la observación de fauna silvestre. Los visitantes acuden a la península para ver las orcas y el espectáculo único que ocurre dos veces al año, cuando las orcas se acercan a la costa para cazar crías de lobos marinos. Otra especie destacada que se puede observar en la costa de Valdés es la ballena franca austral, visible casi con seguridad entre los meses de agosto y octubre.
La Península Valdés también alberga grandes poblaciones de lobos y elefantes marinos, así como colonias de pingüinos. Si te diriges más al sur, a Punta Tombo, podrás visitar una de las mayores colonias de pingüinos de Magallanes del mundo. Cada año nacen cientos de pingüinos aquí, y puedes caminar entre estas amistosas aves por los senderos de esta reserva natural. La mejor época para observarlos es de septiembre a abril, ya que sólo están presentes durante la temporada de anidación.